Contamos con un amplio abanico de estudios no invasivos empleados tanto en el diagnóstico como para el seguimiento de las diferentes patologías que tratamos.

La principal herramienta es el Ultrasonido Vascular. Se trata de un procedimiento diagnóstico sencillo e inocuo. Simplemente requiere colocar un gel transmisor entre la piel del paciente y el transductor, que genera y transmite ondas de ultrasonido que viajan a través de los tejidos y rebotan contra las estructuras que se van encontrando en su camino. Estas ondas vuelven a la sonda de ecografía con importante información que se utiliza para obtener imágenes en escala de grises y gracias al efecto “Doppler” nos permite determinar la dirección y velocidad del flujo sanguíneo en el interior de los vasos y detectar posibles obstrucciones o anomalías en tiempo real, facilitando un diagnóstico preciso y oportuno.